jueves, 24 de enero de 2013

Mensajeros

Recostada en mi fría y solitaria cama a punto de obtener el pacifico sueño que desde hace tiempo me es ajeno. Cayendo suavemente en aquel hermoso estado de semi-consciencia sentí como tu delicada mano se posaba sobre mi gélida mejilla... pero después de unos segundos reaccione, se supone que estoy sola en toda mi casa, abrí mis ojos y observe la inmensidad de la obscura noche; nada, ni un solo rastro de alguna persona que pudo tocar mi mejilla. Acomodándome de nuevo en mi lecho me dispuse a dormir una vez mas pero el frió hormigueo que recorrió por mi mejilla me hizo estremecer.

Tenia los ojos abiertos cuando sucedió, la infinita obscuridad de mi habitación confirmaban mi soledad, sin embargo aquel cariñoso gesto no fue una ilusiono. Analizando unos minutos comprendí y enseguida una dulce sonrisa formaron mis labios

- Hace tiempo que no te acordabas de mi-susurre, y en respuesta el frió de mi mejilla derecha paso al otro lado

Cerré mis ojos y disfrute de aquel amable tacto, poco a poco las lagrimas inundaban mis ojos puesto eran parecidas a las caricias que solías darme. Armándome de valor abrí mis curiosos labios y pregunte

- Y esta vez ¿quien te ha enviado a visitarme?- el frió desapareció para posarse en un punto especifico sobre mi pecho y mis ojos derramaron unas cuantas lagrimas

Cerré mis ojos y su la fría sensación recorrió mi cuello formando con unos brazos imaginarios en un abrazo, yo rodee el aire, pero sabia que estaba ahí  mi cuerpo cada vez estaba mas cansado, por lo que me acurruque en mi cama y antes de sucumbir rente al delicioso sueño nocturno aquel hormigueo iba desapareciendo hasta que no lo sentí mas, pero no duro mucho su ausencia  apareció dicha sensación sobre mis labios otorgándome un beso suave y dulce, una lagrima mas escapo de mis ojos y aquel ser la limpio y tocando por ultima vez mi mejilla desaparecio.

Te preguntaras porque no me asuste frente a aquella aparición,  bueno eso es porque aun que no hayas sido consiente de aquello tu lo enviaste con un recado para mi. Tus sentimientos mas puros se reunieron y llamaron a un pequeño mensajero que los llevó a mi. Ahora solo falta que regreses y me plantes un beso en mis labios mientras acaricias mi mejilla derecha.... ahora solo falta un beso real.

lunes, 21 de enero de 2013

Te odio...

te odio... odio como me tratas... odio como siempre me ignoras... me tienes harta con tanta estupides... ahhh DDDX* xq no me tomas en serio? xq siempre la prefieres???? xq me dejas de lado... xq????... solo deja de jugar conmigo y portate serio de una buena vez... deja de hablar con ella.. y dame la seguridad que necesito para confiar plenamente en tiiiiii!!!!!!!!!!.....

PD: too esto me afecta xq en realidad te amo... pero al mismo tiempo te detesto!!!!

viernes, 11 de enero de 2013

Bajo el cielo gris

Se encontraba muy tranquila sentada una hermosa muchacha con su cabeza gacha y mirada cristalina fijas en el reloj de su teléfono celular a punto de entrar en llanto, respira hondo y cierra sus orbes cafés, vuelve a respirar y exhala un suspiro e inmediatamente se pone de pies y se dirige la la salida de aquel centro comercial , en su caminar parecía un hermoso fantasma pero que pasaba desapercibido por toda la gente. Pasaron dos minutos y un chico de ojos negro entra en el mismo centro comercia, todas las miradas se dirigían haca el, corría con vehemencia por todo el lugar hasta que se detuvo donde aquella muchacha de ojos chocolates había estado hace un momento, al ver aquel lugar vació se preocupo... no es común de ella el marcarse, saca su celular y llama a una persona pero lo recibe el buzón de voz; ya sin aliento frunce el ceño y de la misma forma en la que llego al centro comercial sale.

Por las gélidas calles de una metrópolis no muy importante aquella chica de ojos chocolates baga con su mirada fija en el cielo, sus ojos cristalinos reflejan los intentos por contener las lágrimas y un suspiro demuestra su estado anímico ¿por qué lloras? se pregunta a si misma ¿por qué luchas? se vuelve a preguntar... las rebeldes lágrimas quieren brotar pero ella las reprime con sus ojos cerrados y bajando la cabeza. Al abrir sus bellos ojos de nuevo se encuentra con un gran parque cercano a dicho centro comercial, sin pensarlo dos veces ingresa al descolorido y nada animado parque, que gracias al invierno perdió sus atractivos colores. Ella camina como zombie inmersa en un océano de pensamientos hasta que un recuerdo la detiene y lentamente se acerca a una banca y acostándose sobre el asiento solitario y cierra sus ojos para revivir mejor los recuerdo que inundaron su mente.

Era una  tranquila mañana de un martes en de un verano, el sol brillaba con intensidad y dos jóvenes paseaban por aquel hermoso parque bañado por la luz, sus miradas brillaban por la emoción del momento y charlaban sobre temas triviales, en aquella banca tomaron asiento y prosiguieron con su platica, al cabo de poso minutos  impartieron rumbo hacia un nuevo sector del parque.

Abriendo sus tristes ojos se dirigió hacia otro lugar de aquel inmenso parque, camino por un largo tiempo hasta encontrar un espacio idóneo lleno de césped verde pero húmedo por la pequeña lluvia que caía; sin importarle mucho aquel dato se acostó en aquel tranquilo lugar, contemplo como los arboles tapaban el cielo.

Mientras caminaban encontraron un hermoso lugar cobijado del ardiente sol por la sombra de unos arboles. Ambos chicos se acostaron ahí y contemplaron el hermoso cielo de intenso color celeste, la sonrisa que despedía de la chica era tan amplia y la mirada con la que muchacho la veía era muy cálida.  Pero un inconveniente asusto a la muchacha, justo a su lado había una mariposa gris muerta, ella se asusto muchísimo y salio corriendo, él solo sonrió por su reacción y tomo sus cosas y emprendieron rubo a un nuevo lugar donde descansar del ardiente sol.

Sus ojos retornaron a la realidad y haciendo una mueca recordó que ese lugar no era tan apto para descansar así que siguió su camino. Mientras tanto aquel chico que había salido despavorido del centro comercia buscaba por los alrededores de este establecimiento, pero al detenerse encontró un sujetador de cabello, lo recogió y se adentro en el parque, caminando tranquilamente pensaba en donde la podría encontrar y una idea brillante ingreso en sus pensamientos y con un brillo en sus obscuros ojos corrió una cierta dirección. La muchacha de ojos chocolates había encontrado el lugar perfecto para reposar, se había acostado a lado de un árbol no muy frondoso que dejaba ver el invernal cielo pero protegía de la llovizna que caía. Sentándose mirando en dirección al árbol cerro por sus ojos por ultima vez para recomenzar sus recuerdos cortados. Aquel muchacho llego a esa misma escena totalmente exhausto, se detuvo para tomar aire y su mirada se fijo en aquella chica, una enorme sonrisa se formo en sus labios y lentamente se acerco a ella, se paro en frente de la muchacha y la contemplo, su cabello negro era mas largo desde la ultima vez que estuvieron ahí, también había perdido peso y se encontraba mas pálida; tomo asiento junto a ella y la contemplo.

La pareja se habían refugiado del sol debajo de un pequeño árbol que daba sombra pero también dejaba pasar unos rayos de luz, los dos se encontraban sentados frente a frente, seguían conversando sobre temas sin mucha importancia, los brillantes ojos cafés de aquella muchacha recorrían todo el rostro de aquel chico, el cual le parecía simplemente divino, el a su vez también contemplaba la tez de la muchacha; ambos detuvieron sus miradas en sus labios.

Aun con los ojos cerrados, la chica de obscura cabellera no se daba cuenta que el muchacho se encontraba justo frente a ella, observando sus definidos labios, como en aquel recuerdo, pero algo sorprendió de sobremanera al chico y es que ella tomo su mano y la agarro con fuerza y su rostro se dirigía hacia ella,  la joven estaba tan sumergida en sus recuerdos que no se dio cuenta que el muchacho se encontraba justo en frente de ella y tampoco noto que ella sujetaba su mano... él al reaccionar, sigo con el juego de la chica, cerro sus ojos y empezó a revivir los momentos en que ella se encontraba.

Sus dedos jugaban los unos con los otros, se deleitaban con el delicado roce que ejercían, sentían el calor de sus manos... de pronto la pálida mano de aquel joven se alejo de la mano de la chica y se poso en la mejilla izquierda de ella y jugueteaba con uno mecho de cabello, hasta que sin darse cuenta ambos fijaron su mirada en la del otro, dejaron sus manos sujetadas. Lenta y dulcemente poso toda su mano en la mejilla de la triste muchacha que miraba con brillantes ojos obscuros y cristalinos por unas lágrimas que amenazaban por caer; con el dedo pulgar limpio con la única lágrima que se derramo en ese instante.

Con sus miradas fijas, aquel chico acerco su rostro al de la hermosa chica, de manera muy lenta acorto las distancias entre su rostro hasta quedar a solo unos milímetros, pero las dudas que guardaban en su interior lo hizo detenerse, contemplo por unos instantes el rostro de su amada, ella la miraba con aquellos hermosos ojos marrones, tan abiertos y brillantes; minutos después recordó el desenlace que tubo aquella escena hace ya tiempo y decidió retirarse derrotado, pero las manos de la chica se posaron en sus mejillas y lo atrajo hacia ella y sin pensarlo dos veces poso un casto beso en los labios de su muy amado muchacho.

Perplejo él se quedo congelado por unos segundos, hasta que cerró sus ojos correspondió al beso de aquella mujer, se acercaron más hasta que quedaron abrazados, ella con su rostro en el pecho de su chico y él ocultando su rostro en el cuello de ella. La lluvia comenzó a caer con intensidad pero ellos no se movieron de aquel lugar, permanecieron ahí, abrazados, sintiendo la compañía del otro hasta que su chica levanto la cabeza y sonriendo miro al chico consternado que al verla así sonrío igual... otro beso se entregaron y tomados de la mano partieron hacia un lugar donde refugiarse de la lluvia

miércoles, 2 de enero de 2013

Guillotina

Y bese tus labios, eran tan dulces y suaves.. cerré mis ojos para sentir el sabor de tu boca... era tan perfecto aquel momento en el que solo existíamos los dos. Toque tu rostro al separarnos para recuperar el aliento. Te observe tan hermosa como siempre, con aquellos grises ojos me mirabas, aquellos ojos que gritaban un te amo con desesperación, dime mi princesa ¿que debo hacer para que termine esta tortura? Nena no puedo seguir así .. eres tan bella, tan perfecta, eres toda un diosa que cambio mi vida y  no quiero dejarte ir, pero debo hacerlo... no puedo soportar la idea de perderte pero se que no puedo complacerte; no soy lo suficiente bueno para ti mi amor.

Te abrace fuertemente mientras respiraba el aroma de tu cabello... !oh celestial aroma de los dioses! como es que esta hermosa diosa se escapo de su santuario y termino entre mis brazos, es tan perfecta ante mis ojos... su cabello ondulado obscuro como el cielo nocturno que nos cobija cae delicadamente por sus hombros hasta su espalda baja. Su brillante sonría alumbra toda mi sombría existencia, y es que es ella un ángel caído del cielo, tan amable, tan hermoso que su existencia debería ser un delito en este planeta... y de pronto mi mente se llena de pensamientos tristes.

¿No soy suficiente? replica mi subconsciente... como ser suficiente para semejante princesa... si yo soy solo un simple aldeano enamorado de su deslumbrante belleza. Hay mi querida princesita, si tan solo supieras lo que siento por ti, si tan solo el destino fuera mas gentil, los dos podríamos vivir una eternidad juntos... lastima que las cosas no sean así... no nena no llores... se que es difícil aceptar la cruel realidad. Levanté tu perfecto rostro para contemplar por ultima vez tu bello rostro, esa nariz perfilada y tu piel blanca junto con tu hermoso cabello azabache y Dios mio... aquellos voraces ojos que brotan cristalinas lagrimas.

Nos perdemos en nuestros ojos por un largo tiempo hasta que lentamente me acerque a tu oído y susurré aquellas palabras que dudaba tanto en pronunciar.

- Te amo-dije dulcemente mientras sonrió con timidez, que bien que no pudiste verme mi amor.
- También te amo- suspiraste mientras una enorme sonrisa surca tu rostro... oh nena eres tan hermosa cuando sonríes.

Clave una vez mas mis labios sobre los tuyos, se que este sera nuestro ultimo beso... pues como dije no soy suficiente para ella y tengo que marcharme lejos de su casa, de su vida y hasta de sus recuerdos. La estreché contra mi cuerpo, sintiendo cada parte de su cuerpo, la besé con todo el amor que poseo hasta no poder mas y al separarnos sabemos que es el final de este hermoso y dulce cuento. Los guardias del castillo interrumpieron nuestra despedida, tus ojos grises se llenaron de lagrimas dolorosas mientras vez como me arrastran lejos de tu presencia... ¡oh mi bella princesa! no te sientas mal por mi, que todo esto es mi culpa... por haberme enamorado de ti. Intenté zafarme del agarre de los guardias pero no puedo, quise tomar tu mano que esta extendida hacia mi. Ambos luchamos contras nuestros captores por un tiempo hasta que por fin lo entendemos

-Te amo- susurramos los dos mientras nos rendimos y nos separan para siempre

Que triste es mi destino, que cruel que es tu padre, si tan solo comprendiera el dolor que te causara con todo esto... me siento mal al recordar lo que viví la noche de ayer. La puerta de mi celda se abre y soy escoltado para cumplir con mi condena. En medio de una plaza hay una enorme guillotina y esta a su vez, esta rodeada de una inmensa muchedumbre que susurra... junto a aquel terrorífico aparato esta mi verdugo que espera ansioso mi llegada. Subo los escalones de madera, esto es realmente aterrador, solo espero que ella no lo vea. Un hombre elegante anuncia mi delito, al terminar su discurso me arrodillan frente aquella guillotina, cierro los ojos mientras mi cabeza es colocada sobre la madera, al abrirlos me encuentro con unas fuentes de aguas grises escondidas bajo una vieja capa... ¡POR DIOS NO!

- Vete... no mires esto amor... no lo mires-suplico, ella no se mueve- por favor... márchate- pero en vez de eso se acerca a mi.

Estoy horrorizado, no quiero que ella me vea morir, ella no se lo merece... ¡¡¡Alguien que la aleje de aquí!!!... escucho como las cuerdas que suben hasta el máximo limite al enorme cuchilla...

- ¡CORRE!- ordeno gritando, ella abre su boca para protestar ... pero sus ojos asustado derraman lagrimas y temerosa es escabulle entre la multitud... escucho deslizarse las cuchillas... Gracias a Dios, justo a tiempo que ella huyo...